http://dl.ub.uni-freiburg.de/diglit/martinez1770/0029
Los Esjorcias de Milán
liento deshonor tan feo, por no vi/ir ofendido,
aunque fin armas me veo:
vive Dios:: : Gal. Aparta, loco.
Derríbale en el fuelt*
Cari Y á voíbtros:::
Gal. No le oygais :
en vano quejarfe intenta,
quedefe á llorar íu afrenta^
y vamos donde veáis
mi alegre coronación;
mas por fer mi enojo tanto,
tan bien rae faena efte llanto,
como aquella aclamación. Vanfe.
IFari. Si llorando fe limita
el llanto , mi agravio lave;
aunque una mancha tan grave^
folo con fangre fe quita:
su i afrenta dexas eferita
en mi noble roftro anciano,
y corrido del villano
borrón, que has echado en el,
ya vermegea el papel
adonde firmo fu mano.
Quando efpere7 efectuar
imeftros conciertos > ha fido
la mano que me ha ofendido
la que me había de honrar:
como fe dexó quitar
aquella mano violenta,
del odio , que el pecho alienta,
y es norte ciego, y traydor,
la fenda erró de mí honor,
pero no la de mi afrenta.
Qaé hará en el dolor prefente
efta vejez defdichada?
ferá venganza acertada,
que yo coronarme intente?
Mas no afpire i honrar fu frente
roftro agraviado, ni el labio
lo pronuncie » poco fabio;
pues fi de jufta blafona,
cómo ha de eftar la Corona
hacendó fembra al agravio?
Ya folo morir defeo.
Sale Ludovico.
Lud. Cielos ! que habrá íucedido ?
á Garlos llorando veo
hoy , que con alegre empleo
fu efperanza ha de lograr,
trueca el placer en pefar?
la caufa quiero faber,
que grande debe de fer,
pues que le obliga a llorar.
Hincando la rodilla.
Señor, fi le da el refpeto
licencia á un leal criado,
de preguntar la ocafion,
de ver fu dueño llorando}
í¡ la educación que debo
defde mis primeros años
á tu cafa; íi el tenerte
por mi padre , y por mi amparo
lo permiten > no me niegues
efta noticia que aguardo.
El roftro vuelves * que pena!
no refpondes qué cuidado!
al volver te veo trifte,
y al partir te dexé ufano:
cómo aquellas alegrías
en lagrimas fe han trocado?
Cari. No te admire efta mudanza^
pues eftan fiempre acechando
de tal manera á los guftos
los traydores fobrefaltos,
que al niifmo tiempo que empieza
en el corazón humanó
a prometerle la dicha,
puede prefumirfe el llanto.^
Luí Quando te vengo á d:cir
que ya k la quinta llegaron^
para celebrar las bodas,
galas, y adornos bizarros,
con tal dolor rae recibes ?
Cari Sí, pues ya llegan en vano;
conviertanfe, pu s mi honor
murió a manos de mi agravi0*
las feftwas prevenciones
http://dl.ub.uni-freiburg.de/diglit/martinez1770/0029