Freiburger historische Bestände - digital

4 ' Zegries y

la hizo mas 6 menos,
según el número y precio
de sus esclavos y bienes.
De cada tribu los miembros
que la formaban, unidos
se sosrenian , y entre ellos
gozaban de sus riquezas,
defendían sus derechos,
y siempre unidos partían ■ .
la tristeza ó el contento.
Entre todas la mas fuerte
fue ia de mas lustre y precio,
la de los Abencerrages,
descendientes verdaderos
de nuestros antiguos reyes.
Invencibles en los fieros
combates ; dulces y amables
en las victorias ; supieron
hacer con buenas acciones
que sus enemigos mesmos
los amasen. Generosos
amigos, esposos tiernos,
padres amantes, y en fin
soldados de valor llenos,
merecieron el amor
de nuestros reyes supremos,
Esta preferencia , el odio
les atrajo de los fieros
Zegries, tribu poderosa
por su riqueza, lo mesmo
que aborrecida por su
carácter feroz, sangriento
y orgulloso: estos impíos
no gozan de otro contento
que vlestrozar , incendiar
y destruir : avarientos
de humana sangre , no viven
sin vertería : los mas tiernos
sentimientos de la vida
desprecian ; solo los celos
conocen c;t el amor
para vengarse soberbios.
Al enemigo infeliz,
que bijo yu duro hierro
gimió vencido , jamás
perdonan ; y en fin , resueltos
i ser impíos, parece
que tienen horror y miedo
de hacer una buena acción;
y para prueba ttft impreso

Abencerrages,

cada Zegrí en el escudo
un ensangrentado acero,
y debajo: esta es mí ley.
Irte. Ley bárbara ! Hts. El mas horren

el mas implacable odio (do

les animaba hace tiempo

contra los Abencerrages;

y solicitaban fieros

ocasión en que pudiesen

desplegarle, y en efecto,

la hallaron. Mu ley Hasem

nuestro rey murió, y quisieron

la corona sus dos hijos:

Abenamet, dulce, tierno

y humano , cuanto Boabdif,

fuerte, atrevido y soberbio.

Este carácter gustó

á los Zegries, é hicieron

que unidas todas las tribus

de Granada, por su dueño

le eligiesen : todas, pues,

le juraron su rey, menos

la de los Abencerrages,

que el cetro poner quisieron

en manos de Abenamet;

pero envano» pues se vieron

obligados á ceder

á la multitud. Por esto

merecieron los Zegries

todo el amor y el afecto

de Boabdil, á quien en paga

de sus servicios, pidieron

que proscribiese Ip. tribu

contraria, lo que al momento

fue otorgado por el rey:

pero aun poco satisfechos

de esta concesión , sus vidas

querian, y para hacerlo

con mayor seguridad,

una fiesta dispusieron

en celebridad del rey

donde todos concurrieron:

triste memoria ! Llamados

los Abencerrages fueron;

á una señal convenida,

todos á un punto se vieron

sorprendidos, degollados

sin defensa : cuantos medios

buscaban para ampararse,

fueron cnvario: sujetos.