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y que se vayan, que yo,
amado Alfonso , no tengo
valor para despedirles.
Alf. Si no me voy pronto , creo
que he de llorar como un niño,
aunque ya empiezo á ser viejo.
Cond. Mira , diles que quisiera
recompensarles el zelo
con que me han servido todos,
á mas del salario, pero
que ya saben la pobreza
con que vivo.
Alf. Esto es hecho.
Voy me. Manda V. S. ?
Cond. Sí,
esta casa ::
Alf. Es cara,
Cond. Cierto:
si supieras de algún quarto::
Alf. Sí, sé, pero es muy pequeño
Cond Cabré yo en él?
Alf. Si señora.
Cond.Pvcs ya es bastante: en pudiendo
recogerme yo , aunque sea
algo incómodo , ya es bueno,
porque las comodidades
con nuestro poco dinero
están reñidas, Alfonso.
Alf. Ella aprieta, y yo no puedo
resistir mas. Bien : ocurre
otra cosa f
Cond. Sí: supuesto
que conoces tú en París
muchas casas del comercio,
quisiera que me buscaras
que trabajar.
Alf. ¥o rebiento
de dolor. Bien.
Cond. De ese modo,
para mi sola bien puedo
ganar el sustento.
Atf. Vaya,
apurar mi-sufrimiento
quiere la Condesa. ¿Hay mas?
Cond. No , Alfonso, solo te ruego
que por ser ya las postreras
impertinencias que creo
darte :: :
Alf. Con Dios quede V. S.,
este es el mejor remedio.
Se levanta enternecido , y tomando la
xícara va á partir.
Cond. Mira que dexas aquí
las joyas. {derecha.
Alf. Al punto vuelvo. Parte por l/i
Cond. No habia yo conocido
hasta ahora , lo confieso,
la virtud de Alfonso. Ah quánto
dichosa me hiciera el Ciclo
con darme un arbitrio par*
tenerlo conmigo! Creo
que me serían amables /
los trabajos. Quan diverso
es su corazón del que
demuestra Dronbcll. Perverso
y cruél; él solo es causa
de mi situación. No pienso
que sin su maligno iníluxo
me hubiera el Monarca puesto
en tan deplorable estado.
El vengó mis menosprecios
con esta baxeza , sí:
mas no importa , mientras tengo
mi esperanza en Dios, él basta
para enviarme consuelo.
Alfonso por la derecha.
Alf. Tiene V. S. apuntación
de lo que estamos debiendo
al picaro arrendador
de estos muebles ?
Cond. Ha un momento
que la he tenido en mí mano.
Alf Sáquela V. S., y veremos
á quanto asciende. [da,
Cond.Blcn, voy. Parte por la izquier*
Alf. Pobre señora: un espejo
Tomando las pistolas y un cof recito.
es donde la vanidad
de infinitas de su sexó
debiera mirarse. No,
no se engrieran por cierto
tanto, ni se fiarían
de su opulencia. Yo veo
en sus pocos años toda
la virtud que un contratiempo
jiecesita. Su constancia
es
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