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6 Jcntual j
Enriq. Pues! un estafermo fastidioso,
que la esté moliendo con latines y
mas latines, enamorándola en griego,
y halagándola en hebréo. La servir n
de mucho su dinero y su nobleza, si
no tiene una hora de paz en todo el
dia.
Darm. Miren qué obstáculo !
Enriq. Y si ella no le puede ver , qué
sabrosa vida queréis que pase ?
Darm. Otra necedad! ¿qué vida pasan
las tres partes de las cuatro , que se
casan sin amarse, y aun sin conocerse
? la mas feliz; porque cada uno
sigue su sistema , y no tienen un sí
ni un no por cosa alguna.
Enriq. Y eso es lo que liaman matrimonio
?
Darm. Eso , sí señora: y es absolutamente
necesario para mantener el orden
de las cosas.
Enriq. E! desorden.
Darm. Qué entiendes tu de eso , charlatana
?
Enriq. Para saber que cada uno busca
su bi.'ii estar , y no el del próximo,
y que yo debo buscar el mió , y no
el vuestro , no es menester estudiar
filosofía. .-V buena cuenta , si vos supierais
que habiai> de perder en un
negocio de vuestro comercio , no os
meteri.lis en él , por mantener ese
buen orden. Y en tin , yo seré la primera
que aconseje á Fju'-tirata , que
no se case á di gusto. Sí señor, yo,
yo; y tomadlo como quisiereis. Sa-
ciiíicar á la criatura por un antojo,
eso no es razón Si fuera nacida , como
dicen , en las malvas , se pudiera
íulrir el disparate; pero siendo 'rms
ilustre , y mas hacendada que él, uo
señor ; debe Vm. casarla á su gusto;
que si ei!a muere con umida , su madre
no ha de volver a parida.
Darm Vaya , Enriqueta , no quieras
sofocarme. '\ .
Enriq. Pues daos á la razón.
D.irm. He empeñado ya mi palabra.
Enriq. Como de e^a, se dan hoy , y se
quebrantan mañana sai tanto motivo.
Y al cu"bo, mas regular será que vos
J austlna.
fuítds \ vuestra palabra , que ella í
la suya.
Darm. Pues ha dado alguna?
Enriq.Si señor, vaya : se la ha dado
de casamiento á un muchacho como
unas perlas.
Darm. Qué es lo que dices? te burlas?
de casamiento ? Y á quién ?
Enriq. flétele por donde asoma. ( Mirando
, y señalando Juicio, la izquierda
.)
Darm. Tú estás loca. Jenwal ?
Enriq. Jen val; qué, es mala elección?
Darm. Sí tal supiera...
Enriq. Malo, que no le ha gustado, ap.
ESCENA VI.
Jenival , y los dichos.
Darm. Ven acá, Jenwal, [Corriendo
d encontrar d Jenival , y sacándolo
d la escena.) dime ¡a veidad: ¿es
cieno que amas á Paustina?
Jenv. Ella se ha declarado á su padre
, ap.
Darm Responde.
Jenv. Yo.... señor....
Enriq. V qué e$ mascar? No lo habéis
oido? Se quieren , se quieren....
Jenv. Pero uo creáis que hayamos ultrajado
la virtud, ile re petado siempre
....
Darm. Calla, calla: no me irrites mas
con tu hipocresía. ¿ lis este el pago
que das a mis beneficios? Es esta la
recompensa de haberte recibido en mi
casa , haberte dado mi confi.nza , y
tratarte como á hij ? Poner los ojos
en pau tina , seducir su ¡nacencia....
Jenv No fue tanta mi maldad. La amo,
sí : os lo confieso ; pero qué queríais
que hiciera, viendo las gracias . de
Faustiua ?
Enriq. Tiene razón.
Jenv. Sera capaz eí hombre mas insensible
de conocer sus virtudes, sin que
..de^te poseerlas ?
Enriq. Tiene razón.
Qm&nñí** olvidado quién eres ?
Jl/iv. Un pobre , e. verdad.
Darm. Y un pobre , ha de tener I.i
osadía de.... ni aun mirar a una niña
> eon cien mil guineas de dote ?
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